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Jesús Ruiz...desde Orihuela

Modelo policial kafkiano

Modelo policial kafkiano

El hábito no hace al monje.

 

Hoy no hablamos de religiosos sino de otro tipo de servidores. Se distinguen de los primeros por sus el color de sus "hábitos", de sus uniformes y para colores distintos el de los cuerpos policiales.

 

Verde, amarillo, rojo y azul, es el color de los uniformes de nuestras fuerzas y cuerpos de seguridad. Y como en todo estado democrático, cualquier funcionario que jura o promete el cargo lo hace para hacer respetar y hacer cumplir la constitución española(CE)Norma suprema de la que desciende todo mandato, imbricado en leyes reglamentos y ordenanzas. Por eso alerto que el cambio en las organizaciones siempre es bueno por mucho que honre el año de creación de la institución. Por eso les digo a los responsables de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía  y sobre todo a los Mozos de Escuadra tras el desaire de Lleida, para que hagan un esfuerzo aún mayor  en la interpretación extensiva y sinérgica del mandato del Preámbulo de la Ley Orgánica de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad  y el de la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana y decirle que en esto de la seguridad pública no hay colores ni corralas.

Y dirán ustedes a qué me refiero y como ejemplo conductor les explico la creencia de que un policía local no es más útil a la sociedad que el resto de colores. Digo creencia porque no es cierto si paran a pensar un poco. Estos cuerpos de seguridad local atienden el incumplimiento a una norma de tráfico -un vado permanente- el desarrollo de un delito de riesgo,- una alcoholemia- y lo mismo la central local te está ordenando que se acuda a un robo en curso, deteniendo o comprometiendo al presunto. Eso no lo hacen los cuerpos del Ministerio del Interior por muchos convenios y por mucho que oigan en las noticias de su ciudad. Por lo tanto puedo expresarme en el sentido que, la solución o evolución  está en manos de llevar a estudio el modelo policial de las administraciones locales. Modelo evolutivo adaptado a los problemas.

¿Qué modelo es más útil a la sociedad? ¿Cómo se hace esto? Es fácil. Solo hay que buscar el espíritu de la norma para una interpretación partiendo del concepto de indivisibilidad de la seguridad pública y del consiguiente carácter concurrente del ejercicio de la competencia sobre la misma, dentro del respeto a la autonomía no excluyente de las distintas esferas de la Administración Pública. Casi sin tenerlo en cuenta, es lo que ha sucedido en el mundo local de la seguridad pública, donde se han aplicado extensivamente, el principio de cooperación recíproca y de coordinación orgánica a base de llegar allí donde los Cuerpos de Seguridad del Ministerio del Interior no llegan y todo ello sin dejar de liberar el vado permanente de la cochera de barrio a las ocho de la mañana.

Otro asunto poco cuidado y repetido hasta la insolencia es producto del desconocimiento de la terminología jurídica básica, que todo cargo público debe manejar con soltura. Lo oímos en sus discursos con eso de “fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado” refiriéndose al Cuerpo Nacional de Policía y Guardia Civil (...) sin discernir que la seguridad pública es cosa del Estado y otra es confundir Estado con Gobierno de la nación, del cual depende el Ministerio del Interior. La confusión de los gobernantes es tan atrevida como la ignorancia y el desconocimiento desemboca en conductas de jeraraquía en políticos elegidos por el pueblo ante los miembros dependientes del ministerio. Por ello digo que el cuento de la Cenicienta es un tratado de vida nunca desfasado.

Así que puedo trasladarles que el modelo de servicio policial que ha evolucionado desde 1986 lo encuentra usted en la policía local. Agentes que igual empiezan la mañana haciendo posible el mercadillo de los sábados que seguidamente atienden servicios impropios por naturaleza funcional como es un robo o violencia de género que más tarde está denunciando penalmente a un estafador y al terminar el servicio resuelve un accidente en la calle y emite el informe para que usted cobre su indemnización. Si usted tiene un vado no espere que nunca se lo resuelva un agente que no sea local, aunque la ley lo permite, por dios. 

Por lo tanto y sin traer a cuento el prelidio de Blancanieves, diga en voz baja quien es más util a la sociedad, si la especialidad o la generalidad, si la apariencia o la eficacia. Ya sabe, el hábito no hace al monje. Lo demás, las medallas y las cruces, es polvo y aire.

 


 

Y el cordero se vistió de lobo

Y el cordero se vistió de lobo

Me llama poderosamente la atención los absurdos y superficiales debates sobre política nacional en los medios de comunicación.  También me sorprende la incapacidad de los grandes partidos a la hora de encajar los golpes bajos de tinte electoral y el miedo que les causa la marca Podemos en la arena política. No se dan cuenta que la gente ya no se cree a pies juntillas que un partido político es como un medicamento, con sus aceptados efectos secundarios. Un partído político es un hilo conductor organizado para alcanzar el poder de decisión en una sociedad.

De vez en cuando tiendo el oído para sustraer las opiniones que nacen de tal hecho. Pero a pesar de lo leído y lo escuchado, que no es poco, solo he encontrado mensajes ocultos del tipo del hombre del saco y que viene el lobo Iglesias. Con las cartas boca arriba, el virus Podemos ni es contagioso ni va a cargarse el sistema nervioso electoral porque no dejaríamos que acampase en el cuerpo democrático y lo resolveríamos en una andanada electoral. No hay que tener miedo a Podemos sin mirarse antes al espejo ya que Podemos está en la arena democrática  al ocupar un espacio desocupado o despreocupado por los dos partidos eternos. El que está arriba adora a la parroquia, a sus graneros, a sus votantes de fe ciega pero teme al votante que cree en el poder de su voto selectivo y si algo está creciendo en nuestro país es la cultura política que le está dando un meneo tectónico allí donde más le duele a los dos grandes limpiaparabrisas  -PP&PSOE-; -ahora tú, ahora yo- del sistema político español. Pero no se ilusione ya que somos un pueblo que igual destripamos franceses por invasores y exterminadores del absolutismo que gritamos vivan las cadenas, opresoras, por supuesto.

Lo que la ley esconde

Lo que la ley esconde

Histórico es el revuelo en esferas defensoras de los derechos humanos por la brutalidad que vamos a sufrir a manos de los mal llamados vigilantes jurados en las inmediaciones de las escaleras mecánicas. Hasta he leído y oído que se van a dejar en manos privadas la seguridad pública y las violaciones de derechos y detenciones ilegales van a campar a lo largo de la calle pero con un breve razonamiento y tirando de Gaceta del siglo XIX y BOE del 2014 se desmonta esta tragicomedia.  

En España, mi país,  incluidos los españoles de las cavernas platónicas del norte, se está hurtando el potencial que lleva parejo el conocimiento de la historia. Se la apropian, la visten de los colores de moda, en fin. También hay quién reclama el derecho a ser engañados zampandose la historia de memoria como bolsa de madalena transgénica.

A los norteamericanos se lo perdono casi todo. Su historia empezó cuando se desembarazaron de los ingleses pero nosotros ya comíamos bocadillos de olivas de salmuera con los centuriones de Roma en las salinas de Torrevieja por eso no debemos olvidar que nuestra historia tiene más lustre y huele a cuero viejo y la de ellos a cordita. 

No quiero hablar de memoria histórica y si de historia. No quiero molestar al bebedor de carajillo que demasiado tiene con poder pagarlo ni al político corrupto que demasiado tiene ya con serlo. Llamo la atención de ese director de editorial de comunicación de cualquier medio, que a sabiendas, informa más pensando en doblegar la opinión que en formarla. Llamo también la atención a los que se ganan el sueldo como asesores, consejeros, diputados congresistas, comisionados y portavoces que barren para casa y dejan que el ciudadano, situado erróneamente en la indigna posición del prosélito, se estrelle a toda velocidad con toda su ignorancia. 

Y ya que he hablado de centuriones del siglo II antes de Cristo tratemos a los pretorianos encargados de la seguridad, pero de los de ahora. Los que trabajan, no para Publio Cornelio Escipión Emiliano cuando estuvo en Numancia sino de los modernos trabajadores de la seguridad. De los vigilantes a nómina de la sociedad anónima tan temidos que casi vamos a tener que prohibirlos por decreto para que no exista tan nebuloso peligro de sufrir detenciones masivas. Pero el ciudadano no debe temer a los vigilantes de seguridad sino a su propia e interesada desinformación. 

La verdad es que la ley española en este asunto ya huele a cuero viejo. Ya en 1882 se podía hacer lo mismo que ahora como persona. Si hombre si no se incrédulo. Es la época de de Cánovas del Castillo una ley que perdura, de lo bien que está hecha ya que ningún español ni extranjero podrá ser detenido sino en los casos y en la forma que las leyes prescriban. Ayer como hoy cualquier persona puede detener al que intentare cometer un delito, en el momento de ir a cometerlo y al delincuente que lo esté cometiendo. Hemos pasado desde entonces por dictaduras y repúblicas ominosas y la norma que le da poder para detener a cualquiera, sea vigilante o tendero, vive.

La ley en vigor desde 1882, autoriza a cualquier persona esté o no dentro de la caverna platónica, a detener a una persona que esté cometiendo un delito y al que vaya a cometerlo. Así que no tema por su libertad a no ser que vaya a violar bienes jurídicos a consta de su libertad ya que el que le observe puede elegir entre detener, aplaudir o seguir con el carajillo. Puede mirar de frente o mirar al otro lado. Y eso si que es un peligro, como la posición de ignorancia en la que no quieren que salga usted, por su bien.

 

 

 


 

 

   

Real Decreto de 14 de septiembre de 1882, aprobatorio de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.

Vigencia desde 07 de Octubre de 1882. Esta revisión vigente desde 24 de Febrero de 2013

DE LA DETENCIÓN

Artículo 489 Ningún español ni extranjero podrá ser detenido sino en los casos y en la forma que las leyes prescriban.

Artículo 490 Cualquier persona puede detener:

  • 1.º Al que intentare cometer un delito, en el momento de ir a cometerlo.
  • 2.º Al delincuente, «in fraganti».
  • 3.º Al que se fugare del establecimiento penal en que se halle extinguiendo condena.
  • 4.º Al que se fugare de la cárcel en que estuviere esperando su traslación al establecimiento penal o lugar en que deba cumplir la condena que se le hubiese impuesto por sentencia firme.
  • 5.º Al que se fugare al ser conducido al establecimiento o lugar mencionado en el número anterior.
  • 6.º Al que se fugare estando detenido o preso por causa pendiente.
  • 7.º Al procesado o condenado que estuviere en rebeldía.

Artículo 491 El particular que detuviere a otro justificará, si éste lo exigiere, haber obrado en virtud de motivos racionalmente suficientes para creer que el detenido se hallaba comprendido en alguno de los casos del artículo anterior.

 

 

Adrián el Africano y catorce más

Adrián el Africano y catorce más

"Cuando se atascaba en el barro decía con los brazos en alto y prietos los puños que le segásemos las rodillas de manera tan quijotesca, que, reíamos, ganándonos un resuello y él, respeto" 

Corbilla en mano, agua en la ingle, barro en las rodillas, segando, amolando, sudando; dios. La limpieza del cauce del Azarbe de las Fuentes desde el río hacia el orcelitano Manantial de San Antón, empezaba todos los años en el caluroso julio como dispone la costumbre recopilada en las ordenanzas del agua; jurisdicción privativa pulida por las tres culturas y respetada por los fueros de Valencia.

Duro trabajo este de andar en el barro, aliviado con el frescor del agua fangosa por la quebrada y por ocurrencias como las de Adrián el Africano, viejo legionario de los de antes con un medallero ganado al Sahara español digno de Narváez. Un tío con clase y duro de verdad, de los que hoy escasean. Cuando se atascaba en el barro decía con los brazos en alto y prietos los puños que le segásemos las rodillas de manera tan quijotesca, que, reíamos, ganándonos un resuello y él, respeto. 

Con botijos sudados de agua fresca nos hidrataba el Síndico del Azarbe de la Fuente; elegido por el heredamiento en el Juzgado Privativo por tres años, además señalaba los descansos del cigarro. Esos minutos sabían a placer de marqués, aún allí tirados en el costón recibiendo a lengüetazos la apacible brisa de la tarde y molestados por el sol que se escurría entre el cañar sin cortar en el quijero de braza. En silencio, los más viejos liaban su tabaco con un pulso que ya temblaba por el esfuerzo cansino del cortar, arrimar algas y subir los fardos de la hierba y cañas desde el fondo. La hondura del azarbe enclaustraba los sonidos, acompasados por los secos golpes de nuestras corbillas de Catral y el manoseo de la palas de barro por la gala del agua.

Con el trajín de los quince, apenas se advertían las escasas anguilas que se escurrían como rayos negros a la altura del primer hombre, casi siempre, Adrián. Le gustaba la carne de anguila. Al ser faena difícil por marcar el avance en la maraña se cambiaba con regularidad el puesto de cabeza. Mi turno llegaba antes al ser el mas joven de la cuadrilla y lo señalaba con una mueca el agotado vanguardia. Mi cuerpo empapado seguía a lo suyo y mi mente iba más allá de la refriega de ser el primero; como los que siempre han tenido que ir en cabeza, y veía el oasis secreto de agua clara que se liberaba de su lentitu para recorrer coloreada este manglar oriolano hasta el Segura.

El silencio, la calina y el bochorno agobiaban. Distraía el esfuerzo observando corriente arriba la maraña de carrizos, ramas cruzadas y ribazos del túnel selvático lanceado por el duro sol de julio, lleno de vida independiente, del cada uno a lo suyo y todos pendientes. Nos acercamos así al palmeral andalusí en el que ya no existen las viejas cenias que regaban las palmeras, ni la fiesta del dátil de agosto.

El avance hacia el Monte San Miguel nos adentraba en un bosque de columnas orgullosas, mezclándose la gracia del entorno con el peligro oculto en el barro por los restos de caracolas. Cómo cortaban esas cuchillitas y qué rápido se curaban, ¡qué aguas! Profundas y mercuriosas aguas, que afloraban algo saladas al pasar entre rocas alcalinas para salir al cauce tras descansar en la alberca de Los Baños de San Antón; hoy dicen spa.

Un día de julio y lejano el Día del Pájaro, se terminó, se acabó, miraba atrás y no me lo creía. Lo que cuesta ganarse unas monedas, para gastar. –"El año próximo no volveré Adrián, el barro es muy duro"-. Riendose dijo de reojo – “Duro era el Sahara cuando me alejaba de Tarfaya, por lo menos aquí hemos terminado el trabajo Jesús, dame fuego-“, me dijo sonriendo antes de reír. Nunca más fui al barro, pero a veces, creo que sigo allí, restando palmeras junto a un azarbe sin clientela. Adrián, el Africano, descansa en paz. 

 El manantial, también. 

orihuela tras las palmeras

El emperador desnudo

El emperador desnudo

//...Todos los componentes de su séquito miraban y remiraban, pero ninguno sacaba nada en limpio; no obstante, todo era exclamar, como el Emperador: -¡oh, qué bonito!-, y le aconsejaron que estrenase los vestidos confeccionados con aquella tela inexistente en la procesión que debía celebrarse próximamente. -¡Es preciosa, elegantísima, estupenda!- corría de boca en boca, y todo el mundo parecía extasiado con ella.   El Emperador concedió una condecoración a cada uno de los dos bribones para que se las prendieran en el ojal, y los nombró tejedores imperiales//...      Fragmento del cuento infantil de Hans Christian Andersen, "El traje nuevo del Emperador".

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Con papel, micrófono y atril, uno se debe de sentir todo un personaje y más si depende de un color político que lo posicione en el gallinero. Gustan de anunciar ilusiones y mantenerlas con el nosotros haremos, y como las palabras se la lleva el levante de la tarde, usan los mismos argumentos y los mismos tiempos verbales que los que ocupaban el mismo lugar.

La escusa electoral permanente, impide acercarnos al político y recordarles que su actual posición dominante se justifica en el resultado, no en la posibilidad del será. Desde lejos nos dicen lo que queremos oír –haremos esto y lo otro- con una facilidad y sonrisa que nos anula toda contradicción. Las promesas vendidas como hechos y las palabras encadenadas forman frases que se deshacen en el tiempo, como la ilusión.

Ya sabemos que el más usado es el verbo hacer, -del yo hago tú haces él hace-, en su forma futuro del indicativo. Parece mentira. Nadie cambia el discurso de su errática trayectoria. Cuando te das cuenta, aquí, el yo hago se cumple, pero cuando llegamos al enunciado nosotros haremos, la cosa se desvanece y ya no confiamos en el vosotros haréis a no ser que tengamos el solaje de la ilusión sin avinagrar. Porque no hace falta que endulcen oídos con el yo haría, que los verbos en su forma condicional, no son amigos de la resultante y dicho por un tercero con la mente subcontratada, me produce grima y mala leche. En este caso, cuanto más dulce más amargo, mas si cambian a la forma condicional perfecta del verbo hacer, habría hecho.

Entonces entramos en otra dimensión ya que juegan con la significancia que la palabra escrúpulo precedida del verbo tener, convirtiéndonos, nosotros lo receptores del verbo tener, en sus chivos expiatorios. Casos tiene la historia política reciente para evitar no quedar como pardillos ante esta masa de políticos ominosos que se reinventan todos los días, como calcetín al que se le da la vuelta. Por eso si la evidencia es palpable y ni aún así caemos en la cuenta, ya puede el rey ir desnudo luciendo látigo en el desfile. Tiene que ser un niño el que nos saque los colores ante tal evidente demagogia.

El hada madrina

El hada madrina

A estas alturas de la fiesta no esperemos que el agua se convierta en vino. España y los españoles en los que incluyo a vascos, catalanes, andaluces y ceutíes, hemos dejado de sentir los vapores alucinógenos de un cuento de hadas en el que se confundía riqueza por deuda y carroza dorada por especulación financiera. Visto de otro modo, la varita mágica del Hada Madrina imaginaria de  nuestro tiempo se ha cambiado de chaqueta y los varazos mágicos se los pega ella misma apurando lo que queda incluyendo al príncipe

¿Quiere esto decir que nos han vuelto a colocar donde nunca teníamos que haber salido, que los cuentos, cuentos son y la cenicienta del cuento alucinaba en colores imaginándose hadas madrinas salvadoras?

Al parecer es cierto. Nos hemos despertado de hoy para ayer de humildes cenicientas. Ya no hay príncipes que nos busque por el reino. Además la ratas siguen siendo ratas y las cebollas cebollas son. Este despertar nos ha estampado en el inicio del cuento de los Hermanos Grimm, mordiendo el polvo, trabajando para el que manda sin esperar nada a cambio.

La cosa como que ha cambiado y bastante. Son la Hadas las que se van de fiesta y si pueden se llevan al príncipe en la carroza. El cuento para niños de La Cenicienta es una analogía de la realidad, pero al revés. Así que no me vengan con cuentos y menos si lo dicen por Orihuela aunque sea de gente normal porque no se lo que significa.

 

Ni Estado ni Derecho

Ni Estado ni Derecho

Escribir sobre crisis me aburre. No me da la gana comentar la ruina que hemos fabricado en diez años de disfrute a tutiplén de la cara A del estado social y democrático de derecho. Acabada la fiesta, ya no nos queda, al menos en la conciencia política colectiva, ni Estado ni Derecho. Las instituciones creadas para repartir el gasto público que le daba forma al estado de bienestar siguen existiendo y sin embargo las están vaciando de justificación social para su existencia. Un ejemplo claro es el derecho a la justicia gratuita que viene a ocupar el mismo lugar que el derecho a una vivienda digna en el altillo del armario de los Ni Ni

Ni estado ni derecho es un estado mediocre que no sabe resolver ni las contingencias sobrevenidas a base de cerrar los ojos, mirar para otro lado. No me vale ya el discurso presidencialista de Rajoy ni de Rubalcaba para convencernos de que la cosa está mal por cuestiones externas a su voluntad. Que se lo cuenten a su tía Tula y el que se lo crea que siga sintonizando con el teatro del absurdo made in spain. Me hacen sentir espectador de una representación dramática y sin embrago son ellos los que se escriben el guión. Guión sin reglas a lo que puede salir como las setas gente como el separatista catalán Mas que es el primero que ha dicho ni Estado ni Derecho en plan parvulito, en medio de la clase y pisando a sus compañeros.

Por lo tanto, como nadie tiene la culpa de nada y los derechos de las personas reconocidos en la Constitución no se respetan a no ser que fluya el euro, aun no he visto ni oído que el delito a reformar en el código penal sea el de malversación de fondos públicos multiplicando por cuatro su pena. El de tráfico de influencias, otro tanto, en definitiva meter un buen manojo de inútiles cargos públicos a la sombra como creadores de este Estado Ni Ni conmocionado y desesperado, con una justicia manejada por una Administración de Justicia manoseada indirectamente por los mismos que deberían ir a la sombra y un oligopolio policial que no admite sus fallos ni moderniza sus instituciones. ¿Entiende por qué nadie se mueve?

En definitiva la joven democracia española tiene tembleque. Le ha entrado el picudo, amigo.

Mamadou Sarr, un chico valiente

Mamadou Sarr, un chico valiente

El senegalés se encontraba a cien metros, empapado, observando.

Por la mañana el mar estaba tranquilo. Cuando ha salido el sol,  el viento del oeste alisaba la superficie mientras que en el horizonte se veían los picos del mar de fondo en la zona de Palos que más tarde iba a ser protagonista de unas olas limpias poco vistas en nuestras costas. Esas olas llegarían a nuestras playas a las doce cuando estaban llenas de gente.

Hoy dos niñas que se estaban bañando se han salvado de la marejada que ha llegado casi de improviso. Dos hermanas que estaban jugando a pocos metros de la orilla se han llevado un buen susto. Se las han llevado al hospital los de la ambulancia. Han estado a punto de no contarlo en su Twitter. Estaban agotadas, llenas de cortes junto a sus padres que disfrutaban de un espléndido día de playa.

Nuestras playas tienen gente todo el año con turistas de Europa. Somos Gran Ciudad para algunas cosas y para algunas temporadas. Hoy, gracias a un joven se Senegal, empapado, temblando de frío llamado Mamaduo Sarr, las hermanas siguen vivas. Le he dado las gracias en nombre de los padres y mi enhorabuena. Le he dicho que en este país no dan medallas a los valientes. Ha sonreído.

Lazarillos, mindangos y bellacos

Lazarillos, mindangos y bellacos

En Afganistán hay dos formas de repeler un ataque. Disparar sin cesar detectado el enemigo hasta que se encargan los aviones o a la española, esperar a que aparezcan los aviones americanos que lo de disparar lo tienen crudo al tener contadas las cargas. Allí no es cuestión de poder sino de tener. En la Europa feliz, las cosas van por otros derroteros. No hay que contar  tiros pero la incertidumbre es parecida y el enemigo difuso. Como si la culpa fuese personal, nos esforzamos por conservar el estatus complicándonos la salida tercamente. Si algo tengo claro de nuestra clase política es que no saben como salir del hoyo. Por eso nos dictan el paso. La eliminación de las agendas políticas de servicios públicos por falta de presupuesto es una de las medidas que están adoptando los gobernantes con pasmosa facilidad observando tal parsimonia social. Al menos podemos decir sin error que estamos colaborando como corderitos con el objetivo del déficit, callando.

Cuando comenzó el rumor de crisis allá por el año 2007 los gurús de pueblo pronosticaron revueltas sociales, robos masivos, asesinatos y yo que sé desastres y revoluciones a lo sacamantecas. Tendía la oreja como lo hago ahora y el cambio de percepción en la mente colectiva ha sido asombroso. Antes nos enfadábamos charlando en compañía del vecino sobre la crisis que decían, había por la tele. Comentábamos las noticias de esa crisis lejana y la teníamos esperando en la puerta. El mundo se venía encima para muchos y no hacían nada. Simplemente miraban la pantalla. Ahora, siguen mirando, ven las noticias, ajenos a la realidad. Lo malo es que la crisis no es un mero episodio de falta de liquidez y el gobernante tranquilo, retoza en un gallinero mudo y asustado.

Llegamos a un punto en el que callar, ver la tele y seguir pagando la vida que llevaba antes resulta inviable y no he oído aún anunciar cambios que a largo plazo resulten creíbles para la mente colectiva. Estamos a merced del gobierno y el gobierno está a merced de corporaciones de intereses. De un interés alejado de los conceptos democráticos y a la postre, no se fían de nosotros porque no podemos pagar lo que firmamos. Encima de todo este plantel de problemas domésticos, nos acecha un inmaduro desarrollo autonómico que copa todos los cuchicheos entre las élites políticas mundiales cuando se deciden a comprar títulos valores españoles. Nuestro modelo de estado necesita gastar el triple para ofrecer lo mismo al ciudadano.

Mucha maquinaria y poco producto. Simplemente y para que me entiendan, los gobiernos autonómicos se han comportado como idiota el último que gaste lo justo. Con poca capacidad de generar ingresos, los gobiernos periféricos, repletos de gobernantes confederados y demás parafernalia, lloran ahora a papá Estado como si de un accidente se tratase y esto no es por accidente. Tendemos a buscar al culpable y si no lo encontramos nos lo inventamos porque somos incapaces de verlo delante de nuestras narices. Sucede con Ángela Merkel que es una mujer de Alemania.

Ahora ya no vale lo de antes. Aquí nadie se mueve no sea que salga en la foto. Está todo tranquilo como si del paso de una tormenta se tratase, pero, lo siento colega. Si no piensa, que sepa que lo evidente de un sistema político no eficiente se llama crisis y esta, por sus características, ha llegado para quedarse. Es como la grasa. Si te untas apestas, si no te la quitas la llevas. Y con la crisis que vemos por la tele y nos vacía los bolsillos de calderilla lo mismo. Si no nos descargamos de Estado lo llevaremos a cuestas pringándonos. Ahora dígale eso a la clase gobernante a ver que le dice. Dígale que sobran unos cuantos ya verá como si se queda mucho tiempo mudo, convencen. Somos los mejores, hemos ganado el mundial.

El concejal inglés

El concejal inglés

No creo necesario que argumente lo excepcional que es nuestro municipio en la composición de su electorado. No hace falta que suelte datos de Barbarroja. Que Benferri, como otros municipios independientes de hoy, fue administrado por Orihuela al igual que todo territorio al sur de la ciudad, imprimiéndole un carácter especial a la fórmula la permanencia de barreras invisibles que desde antaño nos han definido como excepcionales, pero que hoy por hoy son un problema más que una seña de identidad. Esos muros que conservamos con celo impiden que el levante nos refresque el cogote, las ideas. El aire se enrarece y el conformismo imperante imposibilita advertir que Orihuela tambien existe, al sur de Vistabella.

                                        "el inglés nos ha entendido perfectamente..."

Como escribí hace un año, nunca ha tenido el Ayuntamiento de Orihuela un gobierno tan representativo como el actual aunque el problema de gobernabilidad lo lastraría. La misma líder conservadora confundía a placer y a propósito viendo la que se le venía encima, mayoría de votos con legitimidad para gobernar sin decir que nuestro sistema no es como el norteamericano. Allí  manda quien mete mas votos a la capaza. Aquí manda el grupo de concejales que más se cerca a veinticinco. Parecido pero no igual. Allí una vez son representantes se ganan el voto aquí manda el partido. Diferente que no parecido.

Y es que pasa el tiempo y el ciudadano sigue esperando resultados. Los políticos de la oposición y los que no lo son, aún no se han enterado que lo son ni del puesto que ocupanNo les sobra razones, las suyas, con frases como "a este gobierno le quedan dos semanas; no pasan de Diciembre; para Semana Santa acabaremos con la vergüenza de ver un inglés en el (mí) Ayuntamiento". A poco que cosecho lindezas como esas largadas por ilustres oriolanos, no pierdo de vista la perenne miopía política que hace crecer votos para la segunda acta de concejal costero a más que conocemos de las trifulcas del gobierno municipal.

Y es para sorprenderse. A la costa, a esa zona que ha dado un concejal al Ayuntamiento de Orihuela le hace falta tan poco que darle nada es un imprudente despropósito. El tiempo, a parte de ayudarnos a posicionar los elementos, pone a cada uno en un sitio. Y el inglés lo sabe, nos ha entendido perfectamente, sabe que con la coyuntura local actual le queda poco tiempo en política y más si para cumplir su misión tiene que comulgar con ruedas de molino y con el desbarajuste urbanístico y desorganización administrativa de la eterna Orihuela Gran Ciudad.

Por eso mismo, no entender las estrategias de los componentes de la Corporación oriolana es simplificar y reducir la maraña de variables afectas. Y es que no hay peligro más grande que las barreras invisibles que voluntariamente se remozan a las afueras de Orihuela. Los trompazos que se da la gente cuando entran y salen son de cómic. Es ridículo a la vez que imposible vestirse de cosmopolitas modernos con proyección internacional sin salir políticamente de la caverna oriolana y en política eso se paga caro y mucho que se arrepiente la oposición. 

 

Democracia sin dinero

Democracia sin dinero

Cuando la economía va por delante del ejercicio de la democracia algo no han hecho bien los estadistas. Nuestro esquizofrénico modelo de Estado; que ya no se siente federal asimétrico, presunto federal, esquivo confederado o inequívocamente avocado al replanteo por peligro de derrumbe, está en una disyuntiva histórica.

 

  ¿Economía política o política económica?

 

Los hay que defienden que para que se den las condiciones necesarias en el ejercicio de la democracia real, la población tiene que tener un determinado nivel adquisitivo consolidado. Sin embargo otros defienden lo contrario argumentando que los dineros no llegan si no hay democracia. Ejemplos para darle la razón a los dos los hay. La ecuación ha funcionado de la siguiente forma. Conforme España se alejaba de los países más transparentes, menos posibilidad hay de disfrutar de la democracia real y del estado de bienestar que tantos quebraderos de cabeza están provocando. Esto es sencillo de entender. Cuantos más políticos pisan las salas de vista mas profesores, médicos y ambulancias sobran en el sistema. Eso se lo digo yo. Su senador no se atreve.

Por otro lado hay expertos que defienden la teoría contraria a la anterior de democracia real, no la de los libros ni la de los modernos sans-culotte con smartphone sino la que respeta las libertades constitucionales. La que respeta las normas que hacen posible la emancipación de la cultura política necesaria en una ciudadanía adulta para distinguir entre un representante de tu voto inepto de otro válido. Este modelo defiende la tesis de que con democracia real, la buena, la que sale en los libros, la que se respira en la calle, la que evita tener colapsada la Administración de los poderes del Estado, hace posible lo que los de la primera teoría necesitan primero, el dinero. Estos defienden que con democracia real no hay umbrales de pobreza preocupantes. Con dinero o sin dinero somos el país con más representantes políticos por voto en relación al entorno internacional que nos rodea pero eso sí, estamos en los últimos puestos de trasparencia.

Por lo tanto hagan el favor de preguntar al que votaron en las elecciones, al senador de su provincia que más cerca le pille, al diputado del Congreso que le plazca, al concejal vecino, al alcalde de su pueblo, en definitiva, a los representantes políticos, si están dispuestos a resolver. Si se creen competentes para enmendar sus incompetencias porque sobre competentes y competencias el Estado está hasta la bandera. 

641 euros

641 euros

Estamos en crisis. Me doy cuenta cuando los políticos escurren el bulto. Ya no es sorpresa que el dinero público se gasta en juergas y cocaína con cobertura de papeles oficiales sin consecuencias ejemplares al saqueo que elimina del mapa el Estado de Bienestar. Hemos llegado a darle la espalda al causante y nos entretenemos con chismes. Podemos denominarnos víctimas conscientemente imprudentes. Vulgarmente, idiotas. 

A Al Capone, gánster con prestigio no se lo pusieron tan fácil. Era un criminal, mafioso y un mafioso es para la sociedad lo que un corrupto en la política. Criminales tanto unos como otros. Estos nuevos criminales electos con una visión de los público novedosa, no disparan fusiles pero arruinan el futuro de otros muchos que ya no saben donde apuntan a dar. Como eso de la guerra es cosa de la memoria y ya no se lleva, la gente no aplaca sus controversias a paseillos y tiros en la nuca a extramuros de los cementerios pero hay que ver que paisaje tan desolador se atisba en nuestra desacraditada democracia parlamentaria. 

No hay una base de opinión pública libre sobre política en Orihuela que salga a la palestra sin vinculaciones partitocráticas. Los pocos blogueros que nos atrevemos a darle a la tecla tenemos el sambenito. No quiero liarles con cuestiones  politológicas que cuenten mi verdad sobre la situación actual y los visos de deriva que tocan la puerta. Hay un dato que me preocupa y se lo digo. Un país con salario mínimo legal de 641 euros no puede permitirse tener esperanza de acampar pagando el litro de combustible a precio bodega de Haro. Hay que tomar decisiones. Los encargados de tomarlas por nosotros no se dan por aludidos. Reza eso de porqué yo y no tú, a la hora de aflojar posiciones y conociendo lo blandos que somos esto da para muchos episodios.

Un dato objetivo que resulta impactante. Un país que conoce que unos  políticos que gestionan lo público, flirtean con la alta costura, con las mieles del Olimpo, dándole al alcohol a la cocaína y a la juerga con euros de nuestros tributos y no se inmuta, dígame que quieren que diagnostiquen en sus previsiones las agencias  de rating sobre nuestra credibilidad financiera y díganme que distinción existe con sus primos los ganster. La corrupción sale cara y no hacerle frente, mucho más. Y las aspirinas como la gasolina, por las nubes.

La advertencia

La advertencia

Cuando no hay salida una de las opciones es seguir hasta el final. Dirán ustedes que eso es fácil de decir porque normalmente lo que hace el conjunto de mortales es buscar una situación convincente al problema dado sin pararse ni un segundo a cuestionar el asunto en sí mismo.

Todo esto viene a cuento por la cantidad ingente de medidas que están promoviendo las autoridades competentes para resolver la crisis que a estas alturas ya no se si la crisis es nuestra o de ellos o es un mal sueño.

Llegados a este punto y viendo que el animal racional metido a gobernante político termina por descargar la culpa en el adversario, y le hincha a medidas correctoras que más bien le aumentan el síndrome de culpabilidad, les propongo una medida, la nuestra, que les dejará fuera de juego y puede destapar la caja de los truenos. Esto lo digo porque, ya que da igual que el ciudadano medio se gane la vida honradamente y bien; como dice mi vecina Remedios,jornalera jubilada, y también da igual a estas alturas que uno no sea un consumidor compulsivo de servicios públicos y visto que el intocable Estado de Bienestar lo van a travestir por decreto, voy a proponerles–imaginariamente de momento-,lo que llamaré Operación Once –O11.

No es un número caprichoso, no es un recuerdo ni una clave, es un ya está bién. Que todo el mundo desaparezca once días. Todo el que hace  sonar el ajuar de la democracia real, esa que se están cargando los que no han proveído las herramientas para evitarlo, que desaparezca del mapa once díasn. Ni facebook ni twitter. Como todo el mundo usted y yo contribuye en mayor o menor medida a que sea factible la democracia y el Estado de Derecho y Social que disfrutamos aparentemente, reduciré el grupo a esa sorda infantería de la administración dejando de lado los cuadros de mando que para ellos tengo otra misión. Esto es, que médicos, bomberos, policías, controladores del control, profesores y todo lo que haga funcionar esas pequeñas piezas de este gran mecano que es la sociedad, se quede fuera de la partida durante once días.

Algunos de ustedes se estarán preguntando a qué partido político pertenezco que si a los antisistema o a los anarquistas pasando por los nihilistas pero el fin es bien distinto y la duda está mal enfocada. Les propongo no ya una receta no una solución sino una salida a esta locura de mandar al zorro a cuidar gallinas. Desapareciendo del mapa un tiempo –once, por decir un número- el sistema se retroalimenta, expulsa lastre, las pulgas abandonan el cadáver nada más se percatan que la sangre no circula, corre el pánico, la autoridad sobrante queda desautorizada, el mundo se les viene encima. No hay que disparar a nadie, no hay que afilar la guillotina, no hay que eliminar al adversario, se transformará como buen animal racional. Sincronizado en el fin a perseguir, usted es el sustento del Estado y la pieza clave del sistema. Imagíne el poder que tiene.

 

¿Qué habéis hecho con mi dinero?

¿Qué habéis hecho con mi dinero?

Campaña electoral sosa. Aburrida. Desmarcada del pasado y huidiza de lo que está por llegar. No hay ilusión por capitanear la nave España. Zapatero ha demostrado no ser tan incompetente. Ha mantenido a la población en sus casas y a los sindicatos en sus despachos a base de estirar y engordar el gasto público. Dicen que los mercados tienen la culpa de todo esto pero amigo lector se lo explico con dos palabras, a uno que no paga el café del bar no le presto yo para el pan.

No somos de fiar para los que tienen dinero por gastar más de lo que podemos pagar. Nos pasa lo mismo a nivel nacional que en el ámbito doméstico cuando entro a un banco y le digo al director que me preste equis que se lo daré, sin garantías, le entra la risa. Lo mínimo que puede hacer es enseñarme la puerta. Además y llegados a este punto, si los bancos actualizasen sus balances, quebrarían. La mayoría de sus activos inmobiliarios no valen ni la mitad. Los bancos no se fían dinero entre ellos, todos deben demasiado. Entonces y visto que la democracia real se hunde sin el dinero que sabiamente debe de administrar el Estado llegamos a la conclusión siguiente. Sin cash no hay derechos efectivos, sin derechos no hay democracia y sin democracia real ¿qué elección de gobierno nos queda? ¿Se sabe ganador el partido que pasa a la oposición con solo el transcurso del tiempo siendo la alternancia a largo plazo sinónimo de decadencia?

Respecto a primera pregunta, lo sencillo es elegir un gobernante que asegure la democracia real sin agotar las fuentes de financiación o lo que es lo mismo que no me cobre por un café dos euros si el mercado lo da por uno. No se puede prometer repartir mas de lo que se puede devolver, llegados a este punto nadie nos prestará, por desconfianza y miedo a perder lo que presta. Respecto a la pregunta de si la asegurada alternancia en el Gobierno de España es análoga a decadencia debo de responder que a no ser que estemos dispuestos a sanear la viabilidad de las políticas públicas de gasto está visto que el problema no es tener dos grandes partidos sino la cultura política como asignatura pendiente ene ste gran país. Si no saneamos los partidos vía urna poco queda ya por hacer para formar parte de los créditos de otra saga del silencio de los corderos.

Por cierto señores gobernantes elegidos por partidos políticos, decisores de las necesidades públicas, cubiertas con gasto público alimentado con fondos públicos dimanantes de los impuestos que yo pago,  ¿qué habéis hecho con mi dinero?

Cuestión de números

Cuestión de números

El otro día oí protestar a una señora en pleno centro urbano. Se quejaba de la tardanza de una ambulancia para su marido al que le había dado un jamacuco. Tendí la oreja y resulta que habían pasado cuarenta minutos desde el aviso y no llegaba el transporte. En los países avanzados se hacen preguntas si el asunto pasa de los diez minutos. En los países con servicios públicos en vías de desarrollo como el nuestro que aún costando lo mismo que los desarrollados se pone por costumbre en los partes y se dice a la prensa que la respuesta a las emergencias es adecuada a esos mágicos diez minutos ¿De risa verdad?

Y es que si destinamos ingentes cantidades de recursos a propaganda pastelera por el mundo nos pasan estas cosas que no nos queda para lo nuestro. Si queremos remontar el Producto Interior Bruto hay que empezar a ver en qué y cómo gastamos nuestro dinero -público-. Poca gracia tiene mirar el precio del litro de gasolina. Así no acampa el ahorro. Saltan las alertas cuando saco cuentas y resulta que hoy en día nos sale el IVA del litro de combustible al veinte por ciento y los impuestos especiales del combustible salen a mas de la mitad de su precio final ¿Tanto dinero consume el Estado? ¿Tiene usted más y mejor servicios básicos que hace diez anos? No ¿Verdad? Sin embargo tenemos que sostener con impuestos una administración pública que ha multiplicado por dos al personal y por tres el gasto ¿Preocupante? Sí, ya lo creo. 

Con la muerte de Gadafi a manos de los suyos como lo fue Musolini creía que la gasolina bajaría de precio y con ellos sería más económico hacer el pan, ir al cine, recoger un enfermo en ambulancia y adelgazar la factura del combustible de los vehículos que llevan y traen a tanto carguito público de aquí para allá. 

Llegan las elecciones legislativas de Noviembre. El ilustre J.L. Zapatero se marcha cabizbajo por la izquierda política y entrará  por la derecha a coger las riendas de esta diligencia desbocada, Rajoy,  temeroso por el desolador panorama que tendrá que gestionar. Atrás quedó el sueño de la alianza de las civilizaciones difícilmente sostenible ya desde el campo teórico y si preguntamos a los expertos politólogos en relaciones internacionales se parten de la risa.

Se hizo añicos la propagandística comparación de lo “Nuestro” con la Champion Ligue como se esfumó lo de que “España va bien”. Mirando los datos oficiales de las páginas del Gobierno, se que habrá más paro. Si no tenemos un resultado positivo del PIB del 1,3 las cuentas no salen y no hay gente que contrate a otra para trabajar. Si además de este dato, se estima que la deuda pública española alcanzará en 2012 el 74,3% del Producto Interior Bruto, estamos hablando que es más del doble que la de 2007. Esto significa que cada euro que ganemos usted,  yo, nosotros Estado, debemos 74 céntimos y lo pagaremos en peores servicios, mas listas de espera y ambulancias que no llegan o lo hacen a los cuarenta minutos y dando gracias. Así que si usted es una víctima del despilfarro, quéjese donde puede cambiarse las cosas. Haga cosas para cambiar los datos.

En Libia se ha librado la guerra de las metralletas pero nuestra panorama es de analógica postguerra y eso tarda en curar, si usted otorga.

 

Orihuela Gran Ciudad y otras historias

Orihuela Gran Ciudad y otras historias

Las grandes discusiones sobre lo ínfimo que resulta ser el problema nos impide ver la magnitud de la cercana amenaza. Esto dicho así sin entremeses puede resultar grandilocuente, producto de un desaforado e  iluminado gilipollas, pero voy al tajo y lo explico con un ejemplo, como nos gusta a los hombres.

Vivo en Orihuela, ciudad embebida en disquisiciones sobre la posición de su ombligo y observo perplejo que, es cierto esa máxima que murmuró un esclavo al ser liberado, "ahora quien me cuidará". Personalizando esa idiosincrasia del oriolano y transportándola a la magnitud que puede llegar a tener la influencia política, los políticos que hacen la política desde los ayuntamientos, desde el Gobierno Valenciano, desde la Diputación, desde el Ministerio, desde la Unión Europea, no se han dado cuenta que estamos enredados en una maraña de despropósitos. Lo digo por lo siguiente y ahora va el ejemplo  no solo para los hombres.

Desde hace veinte años se ha dicho y repetido que se haría la carretera a la costa desde Orihuela. Seguimos con una carretera sin desdoblar como sería lo elocuente. Llegó la autopista en papeles, que no la vía rápida a la costa y nos clavan por malos o tontos por callar y no saber ganárselo,  dos peajes. Se proyecta una faraónica obra viaria producto de una época de derroche y lujuria en el gasto que nunca volverá, llamadas Autopista CV-91, Autovía CV95,  Ronda Autopista Orihuela. Para completar la amalgama viaria se traza la vía de ferrocarril de alta velocidad  AVE cuyo desarrollo urbano va a cambiar la configuración del tráfico tal y como lo conocemos y amárrense los machos como dijo el chófer al perder los frenos. Con tanta promesa y espera, me pregunto yo si nos vamos a quedar en Orihuela mirando como el lisiado del pueblo cuya única ocupación era observar el trasiego en la calle principal, imaginando historias  de segundos  mientras quema su tiempo, viendo el mundo pasar.

No hace mucho que la provincia de Alicante ha estrenado una impresionante y catedralicia terminal aeroportuaria. Si, ya lo creo, impresionante e impresionado al ver que la línea de tren pasa a menos de mil metros de la terminal y no hay enlace desde el interior del aeropuerto al mal llamado apeadero de El Altet, luego, al resto del mundo. No es por nada señores de los distintos gobiernos que gestionan lo público pero es evidente que no tienen en cuenta o se les olvida que desde Mar de Cristal que está en la Manga del Mar Menor hasta Benidorm que sí que saben donde está, tienen una gran demanda asegurada de transporte público como lo tienen ahora los taxis, alquiler de coches y líneas de autocares. Si la mitad de la población está en las costas, si los que llegan al Altet son en su gran mayoría vuelos low cost, si nuestro modelo de turismo es ese y no otro, no se que ha pasado con esas infraestructuras estratégicas.

El ejemplo de las promesas sin sentido lo tenemos en esa carretera a la costa de Orihuela que estoy escuchando ya veinte años como veinte años hace que para llegar al Altet tengo que coger mi coche viendo el tren pasar a menos de un kilómetro. Ahora con la quiebra del sistema financiero, la quiebra vergonzosa de las Cajas de Ahorro que han jugado al doble o nada al financiar sueños particulares y nuestro inmovilismo propio de mirarnos fascinados el ombligo, mas parece que nos viene grande el traje.  Me refiero al traje que le han puesto a Orihuela de Gran ciudad. Así que ya saben señores de las Cámaras de Comercio, políticos, Consellerías y Diputación asociaciones partitocratizadas y demás familias de poder, hagan algo lógico. Algo que tenga sentido en el largo plazo que para sueños ya está la lotería de Diciembre.

Cabañuelas municipales

Cabañuelas municipales

Agosto.Cada día una sorpresa. Del café para todos pasamos a la gasolina para los míos. Mancebo hace magia, destapa una lona y aparece un furgón. Mayoral solamente ha mostrado la primera pátina que encabrona al personal, cuando se ponga a lijar igual descubre una obra de arte. Al resto del equipo de gobierno se les oye calentando motores y el asunto promete ya que hay "piezas" de la maquinaria municipal que influyen como ministros. Son duros de pelar y lucen con poderío su posición en el tablero para con Orihuela recién ascendida a Gran Ciudad. Los concejales con responsabiidad de gobierno se enfrentan a un problema tenáz en su propia casa común en la administración española. Se topan con estructuras confusas mezcladas entre una administración politizada y políticos que aún influyen por lo que fueron. La creencia de provisionlidad de "estos" que han llegado de retruque les ayuda a soportar el trance hasta que lleguen los "suyos".

Al tiempo que se conocen estos hechos, simples flecos del traje, ves crecer el número de indignados de verdad, sorprendidos de lo que leen en los cafés y también compruebas como desaparecen los que quieren conservar su pellejo en el partído mas votado tras la política de tierra quemada del carpe diem llevada a cabo en sus condejalías. Y con lo que hay encima de la mesa ahí está David, atacando al Goliat con balas de paja hasta que el partído lo aguante porque esa estrategia de oposición les viene de perlas a sus adversarios. Amigos, si estas son las muestras de lo que nos vamos a encontrar en la Casa Consistorial, el gobierno nacido del tripartito electoral solo tiene que esforzarse no ya en desgastar al oponente sino en consolidar su reciente estabilidad  y haga posible la gobernanza. Y por supuesto borrón y cuentas con las malas prácticas, esas que han facilitado corruptelas y posibilitado llevar a buen puerto curiosas "hazañas". Este circunloquio lo uso bastante para evitar el término corrupción, cuyo semblante, como la humedad, se amera por las arterias municipales y acaba con la lógica de la función pública de gobierno y el sentido común, ese que nunca pondría lonas donde menos se espera.

Por lo tanto tenemos un gobierno municipal al que le queda hasta noviembre según los entendidos del lugar, una oposición que todavía no se cree que lo es y un Alcalde al que ningunean según otros, todavía, desde la reciente oposición, la misma que dirigió hasta hace bien poco la Casa Consistorial y como dice el refrán quién tuvo retuvo. Es interesante este asunto como anecdóticas son las manifestaciones de poderío que se observan fuera de la ciudad. Para muestras, señales. La guerra de las varas se conoce al ver en una misma procesión de pedanía casi igual número de alcaldes concejales y pedáneos que en la procesión del Santo Entierro. Lo ancianos están pendientes mas de las varas municipales que del santo no pase como en Breda. Pero estas cabañuelas municipales son para interpretarlas a lo largo del año. De momento, sol y buen tiempo.

No caerá esa breva Molt Honorable

No caerá esa breva Molt Honorable

Las comparaciones son odiosas sobre todo en cuestiones antagónicas pero en política cambia el asunto. Tenemos un escenario revuelto en el mundo anglosajón con dimisiones por un asunto que en mi país no se suceden ni pegando fuego al Sálvame hasta que esta misma tarde, mi colega de Valencia me ha llamado para que eligiese restaurante y día para pagar su deuda.

Mi amigo ha perdido la cena que nos apostamos el Domingo. Él, estadíticamente incrédulo con los valores utópicos de la moral política hispana, no veía una salida del Presidente del Consell. Camps se ha ido para sorpresa de sus enemigos. Su escenario es complicado y su agonía no termina en este acto. El pasado viernes el magistrado José Flors, instructor de la causa de los trajes en el Tribunal Superior de Justicia de Valencia, hizo temblar la hasta ahora férrea semblanza de Camps, pero el campo de batalla hay que prepararlo y limpiarlo de comandantes lisiados.

El Partído Popular no puede permitirse encarar unas elecciones con uno de sus pilares enfrascado en un proceso penal en el que pude estar inmerso la mayoría de electos españoles si el sistema de escuchas sitel se emplea a fondo y los jamones de pata negra llevasen cámara. Mi amigo, siguiendo la tónica hispana de el que se mueva no sale en la foto y tonto el que dimita, no se esperaba la escelente jugada del partído y la valiente por digna en nuestra política, dimisión del Molt Honorable. 

Con este nuevo escenario se activa el lanzallamas político. Les llega el limpiaparabrisas al Partído Socialista y con la goma bién sujeta al vidrio. Hay ya ruído de sables. Esto quiere decir que hay permiso para atacar el mundo multicolor  del Presidente Zapatero, las andanzas y desventuras de Alfredo P. Rubacaba, para los amigos.  

Mi amigo es politólogo de formación y profesión. Está desempleado desde que el Consell prescindió de estos profesionales por los tijeretazos al presupuesto. Yo le he dicho que no desespere que los políticos, como el resto de mortales, se acuerdan de Santa Barbara cuando truena y ahora precisamente amenaza tormenta. He doblado la apuesta y ha aceptado diciendo que no caerá esa breva. Ya les contaré.

Legitimidad frente a representatividad

Legitimidad frente a representatividad

Estas elecciones 2011 van a despertar a unos cuantos. No se quién se sorprende. El sistema electoral español premia al partido mas votado por el sistema de reparto proporcional de asignación de votos. En Estados Unidos sería el Partido Popular el que administraría cuatro años, pero como diría una oriolano por Nueva York, Orihuela no es América. Y tanto que no lo es ni nuestro sistema electoral tampoco así que ya va siendo hora de plantear cuestiones.

El primer temblor se siente en las filas de los ganadores. Todos los vínculos relacionales generados alrededor de un partido que durante años ha formado gobierno, se desvanecen cuando en este caso los perdedores de las elecciones pueden formar el gobierno de Orihuela para cuatro años. Esos vínculos empresariales, sociales y ciudadanos que rodean al poder instituido como una cohorte pringosa azuzan al perdedor con todo tipo de artillería. Con estos resultados silban los rumores que corre como la luz. Ya hay nombres de desertores que han sacado número para salir de estampida, de concejales comprados que aún no lo son, de pactos secretos a cuatro años con tirabuzones a izquierdas, de operaciones políticas, que por vergonzosas y atentatorias contra le legalidad no se atreverán a materializar. Son en definitiva parte del ruido molesto que toca tras la consulta electoral. Solo falta oír que como lleguen a gobernar los otros, vendrá el hombre del saco y la bruja mala. 

Desde un punto de vista politológico, la representatividad es mayor si un gobierno está conformado por diversas ideologías o lo que es lo mismo, de distintas opciones de llevar a puerto los mismos fines. Por que los fines de un gobierno sea municipal, autonómico nacional, se materializan con políticas públicas hormadas en la legalidad constitucional. Si hablamos de legitimidad, el que tiene que gobernar es el que sume más concejales en estas elecciones municipales de 2011 que en este caso es Mónica pero nuestra democracia se orienta hacia la representatividad y en América gana el que sume mas uno y el que no lo tenga claro ya sabe, que se lo pregunte al hermano de George W. Bush.

La legitimidad que otorgan doce concejales de una sola marca -Partido Popular- no la tienen por separado el resto de fuerzas presentadas a las urnas pero ya he dicho que no somos presidencialistas. Un gobierno representativo de la pluralidad como el que se está planteando en Orihuela con trece concejales ya de por sí gana en legitimidad al más votado. El problema de la representatividad lo encontraremos en la gobernanza, pero eso es harina de otro costal y objeto a tratar más adelante. De aquí al primer pleno de esta nueva etapa, ya veremos, y oiremos, ya lo creo.

 

Definición de política para despistados

Definición de política para despistados

Cuando una persona dice que no le gusta la política, está hablando de política, ya está opinando. Si la sondeo un poco, solo un poco, no sea que se sienta radiografiada, compruebo que confunde política con partído político. Para llegar a mayor comprensión, le conmino a conducir el asunto al tema de las preferencias. Me la llevo hipotéticamente de compras, si es mujer joven de clase media, educacion media y con capacidad de compra media, nos vamos de compras, vemos los productos y cogemos lo que nos gusta, gustosamente. Si es hombre tanto de lo mismo pero no puedo comparar la política con el futbol por que sería comparar democracia con el voto domiciliado como si del recibo del gas se tratase. Por eso y puestos a traer a la definición los estereopitos y para esos que no entienden la diferencia, la política no es el partido. Política es todo aquello que hacemos en el radio exterior a nuestra esfera privada. Todo ello puede vincularse al denostado concepto política que no significa lo mismo que partído político. Luego ya le meteremos aderezos, compadres, asociaciones y partídos políticos o lo que es lo mismo, opciones políticas con marca registrada.

Por eso, para mi amiga el ir de compras, mirar los escaparates, conocer el cómo le ha ido un determinado producto comprado la temporada anterior y poder elegir otro resulta ser placentero y le da cierta seguridad. Siente libertad. Pues amigos lectores, la política -explicación para despistados- es eso mismo que hemos hablado apartando el futbol pues sería lo mismo decir que la política es una opción fija sin posible cambio, como si de un recibo domiciliado se tratase.

La política es como ir de compras pero sin derecho a devolución antes de los quince dias así que elejir bien el partído político que va a hacer política solo es semejante a ir de compras en el sentido que una mala elección equivale a quedarnos con la compra sin derecho a reclamar.