Tormentas

Es tiempo de tormentas en primavera. La que se ha producido esta tarde se ha presentado con un vendaval que ha puesto a cada uno en su sítio. No ha llovido mucho para lo que parecía que iba a caer. Tambien es tiempo de otro tipo de tormentas, las financieras y estas se anuncian desde tiempo. En la zona euro tenemos a los griegos con el agua hasta el cuello y ahora van a ponerle deberes de castigo. La fortaleza del euro y la imposibilidad de que cada país con problemas deprecie su moneda como hacíamos antes nosotros con la peseta, genera desajustes graves si damos la espalda a las cuentas y a la realidad cambiante.

El alto deficit público axfisia a Grecia. Los recortes van a traer cambios ambiciosos en ese país. Un dato que me ha llamado la atención es que van a reducirse los municipios que de 1.300 pasan a 340 -en España hay 8.111 municipios- que trasladado esto a nuestra Vega Baja sería dejar a Orihuela Torrevieja, Almoradí, Guardamar y el resto, pedanías. También se paralizan las nuevas promociones de funcionarios públicos griegos. Se congelan los sueldos públicos, se suben impuestos. Se flexibiliza el mercado laboral y todo ello en aras de salir a flote con el agua pasando ya el cuello.

En España la situación puede desencadenarse  a largo plazo como se siga con este nivel de endeudamiento. Cierto es que en nuestro país la deuda que soportan las administraciones públicas es precupante y las medidas de contención de la escalada del deficit público cuanto mas tarden, peor. Si de algo estoy orgulloso de este país es que con tal crisis de valores, de instituciones, de empleo y lo que te rondaré morena, actuamos como si no pasase nada, o es que no oímos el ruído chico. Ya saben, "cuando las barbas de tu vecino veas cortar...".